12_04_2018

A menudo nos hemos preguntado cómo podríamos contar mejor la experiencia de nuestra empresa con los Niños Hada.
Pensamos que contar nuestra experiencia personal podía ser quizás la opción correcta, la real, sin tantas frases corporativistas, porque, cuando se trata de temas sociales, no es la imagen lo que cuenta, sino ese maravilloso sentimiento que mueve a las personas a ayudar a los demás, el que nos lleva desde hace años a optar por sustituir los clásicos regalos de Navidad por un compromiso más concreto.

 

Una tarde cualquiera, la televisión de fondo y un libro en la mano.
Presto, como de costumbre, poca atención al torrente de palabras del anfitrión habitual, hasta que me atrae una frase:
"Veo las palabras en mi mente, pero no puedo decirlas".
La imagen es clara, nítida, miro hacia arriba y me entero por primera vez de la existencia de la Fundación Fairy Children. El entusiasmo es contagioso, permanecer indiferente imposible.

 

A partir de aquí comenzó un viaje de conocimiento y profundización. A medida que entrábamos en contacto con estos proyectos, crecía el deseo de poder hacer algo más. Asistimos a reuniones sobre el terreno con la asociación y seguimos sus éxitos a lo largo de 12 meses, conscientes de que algo, por pequeño que fuera, incluso para una familia, habíamos conseguido hacer, todos juntos y con compromiso.

 

Ahora empezamos a oír hablar del autismo cada vez más a menudo, pero en realidad sabemos muy poco sobre sus causas, sus formas y aún menos sobre cómo lo viven las familias cada día, a menudo solas.
En la vida de una familia, el autismo entra de forma prepotente un día cualquiera.

"La familia - como Franco Antonello, padre de Andrea y fundador de Los niños hada - se ve desbordada por la fuerza de un terremoto. Un terremoto que no pasa, sino que dura toda nuestra vida y la de nuestros hijos, incluso después de nosotros. El golpe es muy fuerte y la vida empieza a cambiar, a tomar caminos diferentes, abriendo escenarios y perspectivas que antes eran completamente desconocidos".

Los proyectos propuestos por la asociación son muchos y hemos optado por apoyar El juego promovido por la cooperativa social local de Mantua "Flor de loto.

El "Juego" apoya el itinerario escolar elegido por las familias dando a los niños especiales la oportunidad de socializar en un entorno protegido y los padres disfrutan de momentos de tranquilidad todas las tardes.
Las relaciones, la integración y el aprendizaje son los ingredientes clave con el objetivo de desarrollar la autonomía, las competencias personales y las habilidades en el tiempo de juego individual.
El proyecto es una verdadera ayuda para las familias y está dirigido a niños pequeños con dificultades de aprendizaje, autismo, trastorno por déficit de atención y otros, en los que una intervención precoz es adecuada para lograr resultados valiosos.

 

Si alguien que lea este artículo desea saber más sobre el compromiso y los proyectos promovidos por esta asociación, la página web es: www.ibambinidellefate.it

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